Quizás sea sorprendente que el proceso físico para obtener una imagen de alta calidad de una célula que mide menos de 0.2 micrones sea casi idéntico al que se usa para capturar una galaxia entera con un telescopio, o millas y millas de campos de maíz con un dron o un satélite.
Es incluso más sorprendente que, al examinar estas imágenes, a menudo sean difíciles de diferenciar. Que en ellas surgen patrones, colores y formaciones similares, lo que hace que sea un desafío descifrar si uno está mirando una nebulosa distante o una gota de agua escondida entre los pliegues de una hoja.
Las formas que aparecen detrás de la lente son expresiones de varios procesos naturales y bioquímicos que generalmente pueden modelarse matemáticamente y dan como resultado simetrías, espirales, grietas fractales y rayas. Lo que parecería una gran casualidad depende en realidad de estrictas leyes naturales que siguen principios como las leyes de Plateau de superficie mínima, patrones de Turing y ciclos de retroalimentación constante.
Se repiten independientemente de la escala a la que elegimos observar.
El trabajo comienza en el campo. Recolectando muestras para su posterior disección, acampando en el desierto con mi telescopio, escalando montañas para volar un dron sobre la Sierra Madre.
En el estudio, imprimo miles de estas muestras y así comienza el proceso de análisis: conectando puntos, buscando patrones, repetición, investigando las maneras en las que la naturaleza deja marcas sobre su antigua creación. Deconstruyendo y reconstruyendo.
Ordeno las muestras por color, texturas, patrones y comienzo a ensamblarlas en el lienzo. Las muestras pronto comienzan a fusionarse y se convierten en una masa homogénea. La creación de esta nueva composición descontextualiza cada fotografía individual y le da un nuevo significado.
El proyecto es una oda a lo análogo, pero con una curiosidad por las nuevas tecnologías. Este trabajo busca evidenciar la fina línea entre el orden y el caos, y la manera en la que la materia se organiza y desorganiza según el lente que utilicemos para observarla.